jueves, 12 de marzo de 2009

Praha 3.5... de como soñar


Así fue como llamé a uno de mis últimos mails antes de regresar a mi país de origen legal. Es una introspectiva personal sobre lo que significa soñar metafóricamente comparándolo con soñar literalmente al dormir, a la vez narrando la experiencia que estaba viviendo.

Praha 3.5... de como soñar

Al soñar renuncias a todo aquello que pueda pasar mientras te alejas de la realidad. Es decidir ignorar todo aquello que te ha costado tanto tener, por un momento de fantasía. Es arriesgar, de alguna manera menos física, toda tu vida.
Puedes calcular cuanto tiempo soñar, es fácil, mas es imposible parar el tiempo mientras te fugas del mundo, no puedes tampoco calcular todo aquello que pase mientras tienes unas vacaciones de tu realidad.
Al cerrar los ojos con una idea plasmada en tu mente, no puedes hacer mas que esperar, rogarle al tiempo que no pase, lanzar un ultimo grito desesperado a quien este cerca para pedirle que se quede justo donde esta, tener la esperanza casi ridícula de que nadie más viva mientras tu sueñas; deseas con todas tus fuerzas poderle pedir a todos que ni siquiera respiren. Quisieras poder decir a todos que no quieres perder un solo momento de sus vidas. ¿Quién te va a creer? Al final fuiste tu quien se rehusó a compartir un instante mas al lado de ellos. Fue a ti al que no le bastó lo que veías, lo que sabias y lo que tenías. Fuiste solo tu y tu solo, y por eso nadie te va a esperar, el tiempo no te va a ignorar, e incluso sentirás que acontecen mas sucesos importantes que cuando estabas ahí para compartirlos. Quisieras aferrarte a todo para que nada escape, no quieres perder ni una broma con tus amigos, pero deseas soñar.

Al despertar no quieres abrir los ojos. Tienes el presentimiento que ni siquiera tu eres el mismo. ¿Por qué deberían serlo los demás?
¡No te importa!, eres el ser más egoísta y no quieres, simplemente si pudieras, le habrías prohibido a todos los que te rodean que vivieran si no es contigo.
Abres los ojos después de titubear y descubres que la primera persona a quien anhelabas contar cada detalle extraordinario y literalmente increíble de tu sueño, no está. Se despidió de ti mientras dormías, como un padre que se va a un viaje de negocios, sin siquiera encender la luz, con la mejor intención, que sigas soñando, susurra su despedida sin esperar mayor respuesta. Escuchas la despedida claramente entre sueños, pero eres incapaz de abrir la boca para pedirle que no se vaya porque hay algo que le quieres decir. En vano. Solo cuentas los segundos restantes para poder despertar.

Después de esto temes que al contar tu sueño nadie lo crea, que a nadie le interese. Sabes que tu sueño fue fantástico, te invade la euforia por compartirlo, por llevar a todos a estos lugares y experiencias únicos. De nuevo ese sentimiento. ¿Por qué habrían de creerte? No tienes ningún testigo, ¿lo estas inventando o no? después de todo, sería tan fácil mentir ahora.

Tremendo sueño, duró tanto, casi demasiado.

El único deseo que te queda es poder regresar a la realidad, despertar de tus sueños, recordarlos con una sonrisa e integrarte al mundo que ahora te rodea.

sábado, 7 de marzo de 2009

Recuerdos de un Sueño


¿Qué pasaría si acaso dejara de soñar? ¿Si por fin despertara?
Quiero verte amigo, y a ti, amor mío, sin este filtro de fantasías, quisiera saber si eres como te pienso. Todo recuerdo tuyo que tengo no va más atrás de cuando quedé ante este profundo sueño rendido.
¿Estoy realmente simplemente dormido o es un sueño más profundo lo que estoy viviendo? ¿O estoy en un momento de riesgo inminente, viendo pasar mi vida entera frente a mis ojos? Creo que esta vez sí estoy cerca de morir, creo que más que un sueño, es esto tan solo un pestañeo.
Quisiera recordar que seré, que llegaré a ser algún día, quiero sentir tu caricia, ver tus ojos de nuevo. ¿Lo habré logrado? Espero haber sido feliz hasta este instante y que este instante sea gracias a algo que siempre quise hacer. Si estoy muriendo, espero no estarme arrepintiendo.
Estar en sueño explicaría tantas fases bizarras de mi infancia y juventud; todo eso que parecía tan irreal en el justo momento que pasaba. Seguro todo ha pasado pero no como lo he recordado. Surreales son los recuerdos que recolecto y la pregunta que tengo es la misma. ¿Eres tú?
¿Quién serás tú, a mi lado al despertar? Sé con certeza el color de tus ojos, pues esos ojos tuyos en realidad solo los pude haber soñado; y en un sueño solo los pude haber recordado. Me gustaría que fueran esos que conozco los que me ven descansar en este instante.
Una idea muy diferente me aterroriza. Estoy muriendo de hambre y frío, olvidado en una calle, imaginando como hubiera sido todo eso que jamás tuve: nacer en un hogar feliz, ir a un buen colegio, tener amigos que se convirtieron en hermanos, y conocer a una hermosa chica. Delirante en mi agonía, inventando un pasado brillante. Mi día cotidiano.
¡Me mata la curiosidad de saber quién soy!
Literalmente me mata. De un sueño tan profundo recuerdo solo haber podido despertar al morir. Sería como darse un pellizco para ver si estoy despierto, o algo como un pellizco, pero mucho más fuerte y sin vuelta atrás.
Puede que estés tú también soñando, que al soñar tu alma pasa a un plano existencial común. Que todos los habitantes sean ellos mismos simplemente esperando a despertar. Cada muerte es uno más que debe despertar, muertes abruptas son despertares abruptos, alarmas que suenan en nuestra mesita de noche. Y los suicidios aquellos que supieron estar soñando y no podían esperar un segundo más para volver a la realidad.
Si estoy soñando contigo que compartes mis días, desearía ya despertar; mas si es en este sueño que te conocí, espero soñar el resto de mis días sin poder despertar y así contigo poder estar.